Grosellero, plantación, cultivo y cosecha

Publicado en: septiembre 27, 2023 Modificado el: 1 mayo 2024

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El grosellero negro o grosellero negro europeo (Ribes nigrum) es una especie rústica con un alto potencial biológico, capaz de producir entre 5 y 8 toneladas/ha. Crece espontáneamente en zonas montañosas de Europa (Alpes, Cárpatos), Asia y Norteamérica. En los 2-3 primeros años tras la plantación, el grosellero produce una pequeña cantidad de frutos, pero después de este período, el arbusto alcanza su potencial biológico de producción.

Las bayas del grosellero negro son una importante fuente de nutrientes, con un alto contenido en azúcares, ácidos orgánicos, sodio, potasio, calcio, hierro, fibra dietética y vitaminas (A, D, C, B6, B12).

Características botánicas

El grosellero negro es un arbusto de 1-1,5 m de altura, de crecimiento erecto, que forma 15-25 tallos. En el suelo desarrolla un sistema radicular muy ramificado, a una profundidad de 15-50 cm. Debido al sistema radicular superficial, los trabajos de mantenimiento deben realizarse con cuidado, las raíces deben protegerse. Los tallos crecen vigorosamente en los primeros años, después la intensidad de crecimiento disminuye. Las ramas jóvenes de grosellero negro son delicadamente pubescentes, de color gris rojizo, con pequeñas glándulas (que emiten un olor intenso y específico). Los brotes miden 5-8 mm de largo y tienen forma ovalada. Las hojas del grosellero negro son largas, pecioladas, cubiertas de pelos, con bordes dentados, y las flores se agrupan en inflorescencias racimosas. El fruto es una baya redonda, que puede alcanzar los 20 mm de diámetro y es de color negro. El arbusto florece en abril-mayo y los frutos maduran en julio. La polinización corre a cargo de insectos (especies entomófilas).

Requisitos medioambientales

El grosellero negro tolera bien la semisombra, pero su potencial biológico se manifiesta en condiciones de plena luz. Las mejores producciones se obtienen en zonas donde la temperatura media anual oscila entre 7,5℃ y 8,5℃. Durante el período de latencia, el arbusto soporta temperaturas de hasta -28℃, pero las altas temperaturas del verano pueden ser perjudiciales. A 30℃, el arbusto puede perder sus hojas, los frutos maduran prematuramente, quedándose pequeños y cayéndose. El arbusto requiere al menos 700 mm de precipitaciones/año. El suelo debe ser fértil, profundo, de textura arcillosa y con buen drenaje.

Preparación del terreno
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Para el cultivo del grosellero negro, el terreno se elige en función de los requisitos edafoclimáticos del arbusto. La parcela elegida debe estar situada a una distancia mínima de 500 m de las carreteras con mucho tráfico y a 15-20 km de los contaminantes industriales. La pendiente no debe superar el 10-15%.

Los mejores precursores del grosellero negro son las leguminosas anuales o perennes (guisantes, habas, trébol, alfalfa), así como algunas plantas técnicas (colza, mostaza, Tagetes sp.). Para la fertilización básica, aplique 50-60 t/ha de estiércol o 500-600 kg/ha de abono complejo NPK. El suelo debe prepararse al menos 60 días antes de la plantación y, si está muy infestado de malas hierbas, pueden aplicarse herbicidas no selectivos.

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Plantación
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La época óptima de plantación es entre finales de octubre y la primera década de noviembre. Para obtener una plantación precisa, se puede picar el terreno (se marca en la parcela el lugar de cada arbusto). El esquema de plantación recomendado es de 3 m de distancia entre hileras y 1 m de distancia entre plantas por hilera. Los hoyos se hacen cerca de los piquetes, sin dislocarlos, el día de la plantación o unos días antes, con unas dimensiones de 40x40x30 cm. El material de plantación debe adquirirse únicamente en viveros o centros de investigación autorizados.

En la base de cada hoyo se introduce una mezcla de estiércol bien fermentado y tierra (resultante de la excavación del hoyo). El material de plantación se coloca en el hoyo de forma que 5-6 cm del tallo queden cubiertos por la tierra. Tras la plantación, se compacta la tierra alrededor del arbusto. Al final, las plantas se riegan a fondo y se crea un montículo de 8-10 cm de altura a su alrededor. Tras la plantación o en primavera, los arbustos se acortan a 10-12 cm, de modo que queden 2-3 yemas por encima del montículo.

Trabajos de mantenimiento

Poda
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En los primeros años tras la plantación, se realizan esquejes de formación de la copa. El arbusto resultante debería poder dar frutos a partir del tercer año. El grosellero negro brota desde el nivel del suelo todos los años, y las mayores cantidades de frutos se obtienen en las ramas de 2 y 3 años. En el segundo año tras la plantación, se eligen 4-6 tallos, que se acortan a 40 cm. Todas las demás ramas se eliminan del punto de inserción. Se eliminan los brotes débiles y los afectados por heladas o enfermedades. En el tercer año, además de los 6 tallos, se eligen 4-6 brotes, que se dejarán crecer. Las ramas que crecen en los 6 primeros tallos se acortan a 15-20 cm.

En el cuarto año, se eligen 18-20 tallos sanos (de diferentes edades) y se eliminan los demás del suelo. Se eliminan los crecimientos vegetativos pequeños y débiles (el corte se realiza por encima de una yema orientada hacia la parte externa del arbusto). Así, el tallo que se desarrollará a partir de la yema, sustituirá al tallo eliminado. La poda de los años siguientes debe airear y rejuvenecer el arbusto. Se eliminan las ramas enfermas y secas, así como las viejas (de más de 4 años). Elija 18-20 ramas sanas, de entre uno y tres años, y acórtelas 1/3 de la longitud inicial.

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Mantenimiento del suelo

En los primeros años tras la plantación, los intervalos entre las hileras se mantienen limpios mediante acolchado y azadas repetidas. Las labores de mantenimiento se realizan con cuidado, para evitar dañar el sistema radicular de los arbustos. A partir del tercer año, el terreno se puede rociar con herbicidas autorizados. El intervalo entre hileras puede cultivarse con trébol blanco (Trifolium repens). Esta especie no compite con el grosellero negro por el agua y los nutrientes.

Riego

El riego es obligatorio en las zonas donde las precipitaciones no proporcionan el agua necesaria (al menos 700 mm/año). Normalmente, bastan 4-5 riegos con normas de 400-500 metros cúbicos/ha. El riego puede aplicarse mediante sistemas de riego por aspersión o por goteo, así como por surcos.

Fertilización

Para alcanzar el potencial de producción de la plantación, es necesaria una fertilización adicional. Cada dos años, deben aplicarse 30-40 t/ha de estiércol bien descompuesto y 30-40 gramos/planta de abono complejo NPK. La época óptima de administración es entre noviembre y febrero. Estos fertilizantes pueden incorporarse al suelo con una azada de 10-15 cm de profundidad.

También es eficaz la aplicación semanal de fertilizantes hidrosolubles a través del sistema de riego por goteo, ya que las plantas pueden beneficiarse constantemente de los elementos necesarios. En función de la fenofase, pueden administrarse cantidades óptimas de fertilizantes radiculares con macro y microelementos.

La fertilización radicular puede aumentarse aplicando fertilizantes foliares, en función de las necesidades de la planta y de las condiciones ambientales.

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Para superar los períodos de estrés fisiológico de los groselleros negros, se puede realizar una fertilización foliar y radicular con estimuladores. Pueden aplicarse fertilizantes especiales para mejorar la estructura del suelo y la absorción radicular.

Control de plagas
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El estado fitosanitario de la plantación es muy importante, ya que el grosellero negro se ve afectado por una serie de enfermedades y plagas. La higiene cultural es una de las medidas de prevención de enfermedades y plagas. Consiste en podar, recoger y quemar los tallos y brotes secos o afectados por enfermedades y plagas. Además, las hojas de la plantación deben incorporarse al suelo mediante azadas poco profundas. Las labores de higiene cultural se realizan en el período de latencia (invierno).

Para facilitar las labores de mantenimiento y la recolección, se recomienda entutorar la plantación del grosellero negro. En las plantaciones comerciales de grosellero negro pueden utilizarse sistemas especiales, compuestos de espaldera y alambre. En el caso de superficies pequeñas, las plantas pueden enrejarse con postes.

Cosecha
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Las bayas del grosellero negro se recolectan cuando los frutos de la parte superior de los racimos tienen un color verde rojizo. Los frutos maduran por etapas, desde la base del racimo hasta la parte superior. La recolección se realiza en tiempo fresco y seco y los frutos se almacenan inmediatamente envasados. Se recomienda utilizar envases pequeños para que los frutos no se dañen (5 kg como máximo). Las grosellas recolectadas en el momento óptimo pueden almacenarse en cámaras frigoríficas durante 10 días. En almacenes con atmósfera controlada, los frutos pueden conservarse 35 días.

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