Acedera común, información sobre la tecnología de cultivos
Publicado en: diciembre 13, 2023 Modificado el: 1 mayo 2024
La acedera (Rumex acetosa) es una planta perteneciente a la familia de las poligonáceas. Es una hortaliza apreciada por los consumidores por su sabor fresco y ácido, consumiéndose como ensalada, sopa, puré, etc. No tiene un alto contenido calórico pero contiene grandes cantidades de minerales y vitaminas. La acedera se considera un alimento revitalizante que favorece la digestión y regula el tránsito intestinal. Cabe mencionar que la planta de acedera contiene ácido oxálico y oxalato potásico. Estas sustancias son tóxicas si se consumen en cantidades elevadas. La acedera también tiene propiedades terapéuticas.
El origen de esta especie se sitúa en el centro y norte de Europa. En sus zonas nativas, crece y se desarrolla espontáneamente en los valles fluviales. Aunque se consume desde la antigüedad, la acedera se introdujo en el cultivo en el siglo XV y actualmente se cultiva en todo el mundo.
Particularidades botánicas
Desarrolla una raíz pivotante bien desarrollada que penetra en el suelo hasta una profundidad de 60 cm. Las hojas tienen forma de roseta con aspecto arbustivo. Tienen un pecíolo largo, son lanceoladas y presentan bordes rizados. Es una planta dioica unisexual y desarrolla dos tipos de flores. En la parte apical desarrolla una panícula, con flores de color rosa verdoso. El período de floración es entre mayo y junio. La planta forma un gran número de semillas. Éstas son pequeñas y pueden germinar incluso después de cuatro años.
Requisitos climáticos y edafológicos
Es una planta que puede adaptarse a una gran variedad de condiciones ambientales. Soporta bien las bajas temperaturas y no le afectan las bajas temperaturas invernales. Durante el período vegetativo, no le afectan las temperaturas negativas, soportando temperaturas de hasta -9 grados centígrados. El factor limitante del cultivo de acedera es el agua. Los mejores resultados se obtienen en condiciones de elevada humedad tanto del suelo (70%) como del aire (85%). No le afecta el sombreado y puede cultivarse en campos poco iluminados. Los suelos preferidos son los fértiles que aportan el agua necesaria y los de textura media.
Cultivo
Rotación de cultivos
Prefiere cultivarse después de plantas que dejan la tierra suelta: calabacines, melones, coles, coliflores, brécoles, pimientos, berenjenas y tomates.
Preparación del suelo
Esta fase comienza con el desbroce del terreno. La fertilización básica se realiza con estiércol aplicado en dosis de 30 – 40 toneladas/hectárea. Tras esta operación, se recomienda un arado profundo a una profundidad de 30 – 35 cm. El laboreo del suelo se realiza antes de la siembra. Puede realizarse manualmente (con azada) o de forma semimecánica con una fresadora.
Siembra
Aunque el cultivo de acedera puede establecerse partiendo las matas, el método de establecimiento más adecuado es la siembra directa en el campo. Se utiliza el siguiente esquema de plantación: 25 – 30 cm entre hileras y 10 – 15 cm entre plantas por hilera. La profundidad de siembra es de 1 – 2 cm. No existe un momento óptimo especificado, por lo que la siembra puede realizarse en varios periodos:
- a principios de primavera, cuando las temperaturas superan los 2 – 3 grados centígrados;
- en verano, para que las plantas puedan crecer hasta las heladas;
- a finales de otoño, para que las semillas no germinen hasta el invierno.
Trabajos de cuidado
Al ser un cultivo perenne, que se explota durante 3 o 4 años, requiere varias labores de mantenimiento. En el primer año de cultivo, el aclareo se realiza cuando las plantas forman 2-3 hojas verdaderas. Esta labor tiene por objeto mantener una distancia de 10 – 15 cm entre plantas por hilera. Otro procedimiento crítico es la eliminación del follaje seco. Éstos pueden ser huéspedes de enfermedades y deben retirarse y destruirse. Asimismo, hay que eliminar los tallos florales inmediatamente después de su aparición para estimular la producción de hojas.
A partir del segundo año, se fertiliza. En primavera, poco después de que las plantas hayan empezado a crecer, se pueden aplicar abonos granulados. Además, la acedera se puede abonar foliarmente con fertilizantes específicos.
El control de las malas hierbas se realiza manual o mecánicamente. Se aplican azadas siempre que sea necesario. El riego es obligatorio en las zonas con sequía. El acolchado puede utilizarse para mantener la humedad del suelo y evitar las malas hierbas. Para esta operación se pueden utilizar láminas de polietileno, paja, estiércol sin fermentar u otros materiales. Dependiendo de las condiciones ambientales, el riego se aplica a razón de 200 – 300 metros cúbicos por hectárea a intervalos de 10 – 15 días.
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Cosecha
El momento óptimo para la recolección es cuando la planta ha formado 4-5 hojas tiernas y bien desarrolladas. La operación puede realizarse en varias etapas, a intervalos de entre 10 y 15 días. Las hojas de acedera se cosechan a mano, arrancándolas o cortándolas. La recolección se realiza el mismo día de la venta porque la acedera no tiene capacidad de conservación. En el primer año de cultivo pueden alcanzarse rendimientos de 5 toneladas/ha, y en los años siguientes pueden llegar a 15 toneladas/ha. El cultivo de acedera da rendimientos económicamente eficientes durante 3-4 años, tras los cuales es necesario abandonar el cultivo.